...

Rasca Rascaaa!!=)

Other Love Story

a href="http://www.dolliecrave.com" target=_blank title="Myspace Layouts"> Sad Love Quotes from dolliecrave.com
Sad Love Quotes

jueves, 3 de junio de 2010

Capítulo 39 (Maggie)

When I look at you I see forgiveness, I see the truth. You love me for who I am like the stars hold the moon. Right there where they belong and I know I'm not alone... You appear just like a dream to me; just like a kaleidoscope colors that cover me, all I need, every breath that I breathe. Don't you know you're beautiful? When my world is falling apart, when there is no light to break up the dark. That's when I look at you. When the waves are flooding the shore and I can't find my way home anymore. That's when I look at you... When I look at you...

When I Look At You - Miley Cyrus










Mis ojos se abieron de repente, y tardaron bastante en acostumbrarse a la oscuridad que había en el lugar... Pero poco a poco fueron divisando figuras, tres, concretamente. Dos chicos y una chica.

La chica era muy alta, de pelo rojo como la sangre. El otro chico, sin embargo, tenía el pelo rubio. ¿Dónde estaba el chico de antes? No lo veía.

Los otros dos parecían muy concentrados entre ellos como para darse cuenta de que había despertado, por lo que intenté soltarme de las cuerdas a las que me habían atado con sigilo.

Pero no lo conseguí... Nada más mover la mano ellos giraron sus cabezas hacia mí, y dieron la luz de la habitacón.

- Vaya... Al fin despertaste.- comentó la chica aburrida, mientras me inspeccionaba con la mirada. Ahora que me fijaba, en sus ojos había una mezcla de verde, negro y gris.

Mientras ellos decidían entre susurros qué iban a hacer, yo rezaba porque Meygan estuviera cerca. Miraba a todos los lados, intentando saber dónde se encontraba.

Pero mis pensamientos fueron interrumpidos por el chico de pelo negro, que entró con alguien. En ese momento supe que no habría escapatoria... Habían cogido a Meygan. Ella me dedicó una mirada llena de tristeza y culpa.

Cuando la ataron a mi lado, intenté hablar con ella.

- ¿Qué ha pasado?- susurré con voz queda.

- No lo sé... Pensaba que estabas en un callejón, al lado de la tienda... Y como no te veía me adentré. Entonces ese tío-señaló con la cabeza al de pelo negro- me inmovilizó y me trajo hasta aquí... Maggie, de verdad que esperaba haberte servido de más ayuda... Pero yo no sabía que eran más fuertes que nosotras... Pensaba que eran unos humanos...

- ¿Humanos? ¿No lo son?- inquirí aterrada. Ella suspiró.

- No... No lo son. Son... vampiros.

- ¿Vampiros?- era imposible...

- Sí... Yo no creía que fueran más mayores que yo... Principalmente que yo... Yo llevo siglos viviendo y practicando la fuerza y la mente, pero ellos... Me han derrotado en un abrir y cerrar de ojos... Era prácticamente imposible... No sé ni cómo narices lo han hecho...

- Bueno... Ya se acabaron las palabras.- dijo tajante el chico de pelo rubio, mientras la chica le robaba un beso fiero y apasionado.- Oh, Vikki...- decía él, mientras la otra reía. El otro chico parecía estar a punto de vomitar.

- Oh, Jack...

- ¿Podéis dejar eso para cuando estéis solos? Tenemos demasiado que hacer...

Meygan parecía saber de lo que hablaban, y empezó a removerse desesperadamente, intentándose quitar las cuerdas.

- Meygan, ¿por qué no desapareces y vas a avisar a Alec?- la pregunté, tragándome las palabras que había dicho esta mañana sobre no decir nada a Alec.

- No puedo... Ni siquiera conectarme mentalmente con él... No sé qué coño pasa en este lugar... Pero no me da buena espina... Voy a intentar escapar de aquí. No te muevas...

Finalmente ella consiguió quitarse las cuerdas con sumo cuidado de que nadie la escuchara. Y lo más rápido que pudo salió corriendo a intentar alcanzar la puerta.

Pero lo que no nos esperábamos ninguna de las dos era que la puerta estaba cerrada con llave, ni que los tipos esos tenían una espada de color azulado que iban a clavar a Meygan en la tripa.

Ella no predijo el movimiento, por lo que cuando la espada le atravesó la piel, gritó de dolor, a la vez que se encogía y se caía al suelo.

¿Por qué? era la pregunta.

- Bien... Así te estarás calladita un rato.- dijo, mientras limpiaba con el dedo la sangre de la espada, y se lo metía en la boca, saboreando el intenso olor a sangre que había en la habitación.

- ¿Cómo...?- Meygan era inmortal, era imposible que la hubieran hecho daño alguno.

- ¡Aii, querida!- suspiró el tal Jack, mientras levantaba mi barbilla y hacía que dirigiera mi mirada hacia él.- Fuimos a unas montañas antes de pasar por aquí... Sabíamos que estarías protegida por vampiros, e incluso pensamos que por creados... Así que hicimos uso de una piedra semipreciosa llamada indigolita.- al oír ese nombre me quedé completamente paralizada. Esa era la piedra de la que me habló Alec.- Y creamos una espada, solo por si acaso. Ahora sabemos que nos ha hecho bastante falta.- se carcajeó, y sus dos compañeros le acompañaron. ¿Cómo podía bromear cuando ella estaba de ese modo, tirada en el suelo y gimiendo de dolor?

- Sois unos asquerosos.- dije con repugnancia, y mordí la mano de Jack, cosa que le provocó aún más. Se enfadó, y con la espada me hizo unos rasguños en la garganta y en los pómulos.

- ¿Cuándo te darás cuenta de que es mejor que estés callada?- si me estaba callada, ellos se saldrían con la suya, y eso era lo que menos quería en esos momentos.

Me las apañé para soltarme los pies, e ipsofacto, le pegué una patada en la tibia al chico de pelo moreno que se iba a acercar a mí. Éste se enfadó tanto, que me retorció el brazo hasta que yo di una exclamación ahogada.

- ¿Qué queréis?- conseguí decir, entre gritos. Jack sonrió.

- Te queremos a ti. Queremos que estés muerta... Por tu culpa y la de tu padre nos han pasado muchas cosas, y han muerto muchas personas, no tan inocentes, simplemente por darnos unos caprichos... En fin... Ya que no podemos acercarnos a tu padre, te mataremos a ti. Tú eres su sucesora... La princesa.- esas últimas palabras las pronunció con diversión.

- Vale...- comencé yo.- He sido demasiado tolerante hasta ahora... Pero creo que me estoy comenzando a cansar...

No sé cómo comenzamos una pelea, ellos contra mí... Y yo perdía. Tenía todo el cuerpo lleno de sangre, con rozaduras y rajas. Mi ropa también se había roto bastante, hasta el punto de que la camiseta de manga larga que llevaba parecía una de tirantes, y los pantalones unos shorts. Sin embargo ellos parecían aburridos...

- Venga... Muéstranos tu verdadera furia, princesa.- dijo el de pelo moreno.

- Tyler, tío, date prisa, los demás también queremos luchar.- comentó Vikki con pesadez, a lo que él sonrió aún más...

- Me temo que no os daré ese placer, colegas.- y se abalanzó sobre mí, intenando morder mi cuello, pero no se lo pondría tan fácil.

Rodamos a lo largo de la habitación, yo intentando pegarle como podía, y él esquivando fácilmente mis movimientos. Terminó por inmovilizarme, y lentamente se fue acercando a mi garganta...

Pero una luz apareció de repente, y sus cuerpos explotaron en mil pedazos, dejando en su lugar pequeñas motas de polvo y cenizas.

Yo me acerqué lo más rápido que pude a Meygan, mientras esa luz continuaba resplandeciendo.

- ¿Estás bien, Meygan? ¡¡Lo siento!! Debería haberte hecho caso, deberíamos haberle dicho a Alec desde un principio...- gritaba con las lágrimas cayendo por mis mejillas.- Lo siento muchísimo... Siento mucho haber sido así ante esta situación, pero por favor... ¡¡¡Ponte bien!!! ¡Contéstame! ¡¡¡Meygan!!!

Ella abrió los ojos, y sonrió.

- Lo has hecho muy bien Maggie... De verdad... Has sido muy valiente al enfrentarte a esos tipos... - tosió, y la luz de antes desapareció, dejando ver uan figura.

¡¡Alec!! pensé. Y fui corriendo a abrazarlo.

- No sabía que hacer... Siento no habértelo dicho...

Entonces me di cuenta de que él no era Alec, sino Patch. Genial...

- ¿Qué haces aquí?- espeté, intentando mantenerme en pie.

- ¿Tú qué crees? Salvándote la vida.- replicó él. Vida...

- Patch, por favor, ayúdame y haz que Meygan se ponga bien... Te lo ruego...

- ¿Qué ha pasado?- preguntó, mientras se acercaba al cuerpo de Meygan.

- La han clavado una espada de indigolita...- la última palabra le tensó.

- Tendría que consultarlo con mi padre... Y con los demás dioses... Pero primero tienes que curarte esas heridas...

- ¿Y esa hostilidad y preocupación hacia mí?- pregunté algo mareada.

- Me pareces bastante interesante.- se limitó a contestar. Su cara de diversión cambió a una de absoluta preocupación.- Maggie... ¿Te encuentras bien?- la pregunta me sorprendió. ¿Tan mal me veía?

- Sí... Perfectam...

De repente, todo se volvió negro.






Noos olvidéis comentar!!!! Espero k os guste el capi.
Bss.
Rose.Twi

2 Ayuditas^^:

mmariab dijo...

me ENCANTO! enserio no puedo esperar a que publiques.... no hay mejor cosa que en mi cumpleaños un cap tan interesante de una de mis hostorias favoritas.. un beso cuidate y paste por mis blogs (:

Melissa dijo...

Oh por Dios!! donde está Alec!!?? T-T y que le pasó a Maggie?? ya quiero saber!!

Besos!!